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martes, 19 de abril de 2022

Dinero fácil (12)

Halwok se había sentado en el asiento de Patrick y este permanecía de pie, mirando las imágenes que emitía la sonda que había enviado a la zona de perforación. 

-   Los restos son de mineral Thalback -aseguró Halwok-. Pero me parece raro que construyesen toda esta base para sacar Thalback. Lo normal son colonias y los asteroides son prospectados con naves que van y vienen. 

-   ¿Entonces, qué es lo que opináis de todo esto? -preguntó Patrick a sus oficiales. 

-   Ya que estamos aquí deberíamos ver si hay algo que nos pudiese venir bien -contestó Victor-. Seguiré haciendo que las sondas revisen el resto de la base. Por ahora solo nos moveremos por el hangar y los compartimentos más cercanos. Si todo sigue igual, podemos introducirnos más para revisar la base. 

-   Es verdad que necesitamos suministros y este hangar parece lleno -añadió Halwok-. Pero creo que debemos ir poco a poco. 

-   Yo creo que debemos investigar, pero con los trajes especiales -intervino Valerie-. Podríamos estar ante una epidemia en la base y por eso tuvieron que irse con tanta rapidez, ¿no? 

-   Bien, seremos precavidos, me gusta la idea de Valerie -sentenció Patrick-. Ahora hay que decidir quién baja. ¿A quién llevarás, Valerie? 

-   ¿Yo? 

-   Creo que es lo mejor, un oficial tiene que dirigir el grupo -explicó Patrick-. Yo no me puedo ir y Victor tiene que estar atento a los sensores y sondas. Si no me equivoco, Halwok tiene demasiado trabajo en la Folkung. Además, confió en tu buen juicio. 

-   Está bien -asintió Valerie, que miró a sus compañeros que movían sus cabezas en señal de asentimiento, corroborando las palabras del capitán-. En ese caso, supongo que tendrá que venir Dherek, porque necesitamos a alguien que sepa lo que se necesita en la sala de máquinas y por otro lado quiero a Lharka y a Diane. El primero es fuerte y la segunda hábil con las consolas. Me he fijado que algunas de esas cajas tienen cerrojos de seguridad. Deben ser importantes. 

-   ¿Todos de acuerdo con la decisión de Valerie? 

-   Sí -afirmaron Halwok y Victor al unísono. 

-   Pues prepara a tu equipo, Valerie -ordenó Patrick-. El resto a sus labores. Voy a ver como esta la nave. Con cualquier cosa, me llamáis.

Halwok y Valerie se marcharon los primeros, mientras que Patrick se quedó mirando el hangar que lo rodeaba y las imágenes que mandaban las sondas. Actualmente, una regresaba de la mina. Otra seguía explorando los oscuros pasillos de la base y la tercera seguía revisando el exterior de la estructura. Al poco, desde arriba pudo ver como los cuatro tripulantes ya empezaban a danzar por el hangar, revisando una a una las cajas. Se despidió de Victor y se fue a pasear por la nave, atento a cualquier llamada de aviso.

En la cubierta inferior se encontró con Halwok, que revisaba el sistema fachada que había antes de llegar a la compuerta de la parte superior de la sala de máquinas. 

-   Están fritos -dijo Halwok, con un deje molesto-. Lo mismo que afectó al reactor, los ha dejado inservibles. Tardaré mucho en arreglarlos. Necesito un astillero. 

-   Pues no podemos entrar en ningún sistema importante sin que funcionen -advirtió Patrick-. Si aquí hubiera piezas podrías arreglarlos. 

-   Con tiempo, no hay problema. Pero necesito placas de computación y muchas piezas -aseguró Halwok. 

-   Pues avisa a Dherek -ordenó Patrick-. Si es necesario que desmonten el sistema eléctrico de alguna consola. 

-   Bien.

Patrick se alejó y se dirigió hacia su camarote. Justo cuando pasaba ante la compuerta del de Halwok, esta se abrió. Elea le miró y cerró de inmediato la puerta. Patrick suspiró y se dirigió a la escala, para descender a la cubierta de carga. Le había parecido ver, en el escaso momento que había estado la compuerta abierta, a la niña tumbada en la cama, inmóvil, con las manos sobre el pecho. Durante esos segundos que había tenido, le había parecido que la piel de la niña era muy pálida, con ese tono típico de los xilan, pero claramente no lo era. Lo otro que le vino a la mente, es que parecía una muerta. Pero esa idea solo le hizo reírse, ya que en ese caso, Valerie le hubiera informado antes. Sin duda iba a necesitar otro café para aguantar en esta penosa situación.

Estaba sirviéndose el café cuando Valerie le contactó por el comunicador, indicando que debía ver lo que habían traído a la nave. La mayoría de las cajas estaban llenas de suministros de construcción. Dherek los había revisado, pero no eran lo que buscaban.

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